Las ratas pueden ser excelentes mascotas, son roedores muy inteligentes y fáciles de cuidar. Pero antes de tener una rata en casa, se debe saber de dónde proceden, lo mejor es adoptarlos de lugares que brinden confianza. Para nada deben recogerse de la calle, ya que pueden tener infecciones que afecten la salud de las personas. Dentro de las muchas mascotas que se pueden tener en casa se encuentran las ratas, unos roedores muy inteligentes y sociables que según el cuidado que se les dé, pueden convertirse en animales domésticos muy especiales.
Aunque parezca mentira esta especie es de un cuidado muy sencillo, son fáciles de adiestrar y se sentirán mucho mejor si comparten su jaula con otras ratas. Resultan ser unos roedores muy curiosos y para algunas personas su compañía resulta muy similar a la de un perro.
En cuanto a sus características físicas, los machos son más grandes que las hembras pero a la vez son menos activos y su peso puede llevar hasta los 700 gramos. Las ratas pueden vivir hasta 2 años, son muy inteligentes, listas y hasta divertidas.
Su espacio puede ser un pecera de regular tamaño con mayor ventilación, y por lo mismo, necesita de mucha limpieza para evitar que inhale vapores fuertes como el amoniaco de la orina.
Tampoco deben estar expuestas a la luz del sol, y el piso en donde estén colocadas, debe ser sólido y estar cubierto con papel periódico, o con aserrín.
Las ratas son roedores que comen de todo, por lo cual su dieta debe ser variada. Es importante ofrecerle vegetales verdes, granos y vitaminas. Se les puede dar también futas frescas, semillas, frijoles cocidos, etc. No es bueno darle jugos cítricos a los machos, ya que existe un químico en la cáscara que se adhiere a una proteína de sus riñones, pudiendo causar cáncer.
Los cítricos frescos deben ser sin cáscara y sin corteza para los machos, las hembras no presentan mayores problemas y pueden comer de todo.
Los especialistas recomiendan el Oxbow Regal rat, Mazuri o los bloques de Harlan Teklas, que pueden ser adquiridos en algunas tiendas especializadas, o por internet.
Los machos y hembras no deben permanecer ni jugar juntos a no ser que se espere un acoplamiento.
Antes de tener una rata en casa, se debe saber de dónde proceden, lo mejor es adoptarlos de lugares que brinden confianza. Para nada deben recogerse de la calle, ya que pueden tener infecciones que afecten la salud de las personas.