Una de las enfermedades más comunes en los hámsters es la colibacilosis, una afección en el estómago que se presenta con varios síntomas como diarrea, delgadez extrema, pérdida de apetito e hinchazón de algunos óganos como el hígado y el vaso. Tener un hámster en casa se ha convertido en algo muy común, ya que en los últimos años se trata de una de las mascotas más populares para chicos y grandes.
No resulta muy complicado hacernos responsables de este tipo de roedor, pero al igual que con cualquier animal, se le deben ofrecer ciertos cuidados básicos para que disfrute de una buena calidad de vida.
Tener una jaula apropiada con todo lo necesario como comederos, bebederos y algunos juguetes será más que suficiente. Pero tampoco debemos dejar pasar la salud de la mascota, llevándola con el veterinario cuando veamos que algo no anda bien.
Es normal que los animales domésticos se enfermen de vez en cuando, pero esto suele ocurrir con más frecuencia cuando son descuidadas. Si hablamos de los hámsteres, una de las enfermedades más graves que pueden presentar es la colibacilosis.
Este mal no es otra cosa que una afección en el estómago del roedor que surge como consecuencia de algún desequilibrio en su organismo.
En su mayoría, esta afección se presenta debido a cambios abruptos en la alimentación del animal, cuando se le ofrece comida en mal estado. En algunos casos, se ha debido a la contaminación del agua que toma la mascota, situación que requiere ser muy cuidadosos en la higiene del alimento que se le brinda.
Uno de los síntomas de la colibacilosis es la diarrea que se presenta, lo que hace que el ano del roedor permanezca siempre húmedo cuando la enfermedad está muy avanzada. Además, el hámster baja de peso, se vuelve apático, pierde el apetito, órganos internos como el hígado y el vaso se hinchan y comienza a presentar problemas en la respiración.
Se trata de una enfermedad bastante grave y que debe ser diagnosticada y tratada a tiempo e lo contrario, el pequeño animal podría morir en pocos días.