Los cobayos pueden ser las mascotas perfectas para niños y adultos. Son unos roedores tranquilos, sociables y para nada agesivos. Su alimentación no es para nada complicada y pueden compartir su jaula con sus parientes los conejos. Los cobayos, conocidos también como cuyes, cuyos, conejillos de indias o Guinea pigs, son unos pequeños roedores, muy resistentes, suaves y nada agresivos que, en la actualidad se han convertido en las mascotas preferidas de grandes y chicos.
Estos animalitos viven formando pequeños grupos familiares, tienen la costumbre de habitar en pequeñas madrigueras y suelen comer muy temprano cuando recién amanece y por las tardes antes del anochecer. Cuando se encuentran en su hábitat natural, se esconden antes de que oscurezca para evitar ser atrapados por sus depredadores naturales.
Tampoco están acostumbrados a beber enormes cantidades de agua, al ser libres se alimentan de frutas y verduras frescas y de estos, obtienen el agua suficiente.
Cuando se encuentran en cautiverio, su vida y alimentación pude ser un poco distinta, igual siguen comiendo verduras y frutas, pero se les puede agregar otro tipo de alimentos sin ningún problema. En este caso, quien esté a cargo del animalito, debe brindarle también agua limpia y cambiarla todos los días.
Parece ser que los cobayos tienen cierto parentesco con los conejos, y al igual que ellos, estos roedores suelen ser coprófagos, es decir que se comen sus restos alimenticios una vez que son eliminados por el ano. Lo que sucede es que tienen un sistema digestivo poco agresivo y mucha de la comida no es procesada. Por eso para poder completarla y aprovechar todos los nutrientes, la vuelven a ingerir.
Según se ha podido comprobar, los cuyes coprófagos son aquellos que viven en su propio hábitat, siendo menor los casos de cuyes domésticos.
Aparte de ser de tamaño chico, existen de todos los colores y con distintas variedades de pelajes. Algunos tienen su pelo largo y suave que les tapa hasta los ojos, otros poseen el pelo corto y áspero, pero todos son lindos, tranquilos y no muerden a no ser que se sientan agredidos.
Incluso pueden compartir su jaula con conejos, pero para ello la jaula debe ser amplia, y cada animal debe tener sus comederos y bebederos en distintos lugares y permanecer siempre limpios.
Los cuyes tienen unos dientes grandes y fuertes que les crecen durante toda su vida, por eso es mejor darles alimentos duros para que los desgasten y no se lastimen. Tienen dos dientes incisivos superiores y dos inferiores.
Son parte de la orden rodentia como las ratas y los ratones pero pertenecen a la familia de los cavidos, es decir tienen cuatro dedos en las patas delanteras y tres dedos en las patas traseras.
Se acostumbran rápidamente a convivir junto con los humanos y pueden ser las mejores mascotas para niños mayores de diez años.