Todos los animales huelen pero teniendo como mascota a los perros conocemos más de sus olores. Los perfumes naturales de los perros se pueden deber a muchas cosas como sus fluidos corporales y otras secreciones que le sirven incluso para la comunicación.
Los perros emiten secreciones olorosas que le sirven para comunicarse con otros animales de su especie. Las zonas que suelen liberar el olor están ubicadas en las orejas, el ano y las almohadillas. Estos olores marcan territorios y para evitar conflictos de alguna forma avisan a otros perros que ya existe un perro bastante territorial.
La falta de aseo también representa un problema que fomenta los olores fuertes del perro. Por eso debes bañar a la mascota, realizar una higiene profunda de muchas zonas como los dientes y el pelo. Limpiando a tu perro no solamente evitas o eliminas olores, también cuidas su salud evitando la aparición de enfermedades bucales o de la piel.
Las enfermedades de la piel son otras de las causantes del mal olor del perro. Tienes que estar alerta, acudir al veterinario para que revise a la mascota. Una enfermedad conocida es la otitis, suele causar un mal olor. Recuerda además que si suministras medicamentos al perro, los malos olores pueden tomar fuerza.