Los gatos son las mascotas ideales para la mayoría, pero muchos mitos y leyendas se han escrito sobre ellos. Entre los más destacables figuran el que tiene siete vidas, lo cual es totalmente falso. Tampoco son provocadores de asma y en casos extremos han sido protadores de toxoplasmosis. Para muchos los gatos son las mascotas perfectas, son animales independientes, libres y hasta encantadores. Pero alrededor de estos simpáticos felinos de ojos claros, circulan una serie de mitos y leyendas que, a pesar de tantos años, aun se mantienen vigentes y hasta creíbles.
Desde hace aproximadamente 9.500 años, el gato doméstico comparte su vida con los humanos y en la actualidad es una de las mascotas más comunes que se tienen en muchos hogares, convirtiéndose en el animal ideal para servir de compañía.
Entre los mitos existentes, los más comunes son los relacionados a que es el único animal sobre la tierra que tiene siete vidas. Este mito llega desde el siglo XVIII, cuando en aquella época los gatos estaban desesperados por la persecución a la que eran sometidos y se escondían por donde podían, apareciendo y desapareciendo de un momento a otro. Pero la verdad es que no tienen tantas vidas.
También se le ha vínculado con ser los causantes del asma, pero muchas pruebas realizadas han concluido que no son la razón, pudiendo sí causar algún tipo de alergia.
Un tema bastante común y demasiado comentado es el que tiene que ver con el embarazo. Muchas mujeres en periodo de gestación tratan de deshacerse de su mascota felina por temor a sufrir de toxoplasmosis. Pero en realidad, el tener un gato en casa no significa que desarrollaremos la enfermedad, solo hay que consultar con el médico acerca de un posible peligro y evitar limpiar las heces y la caja de arena del gato. Si no hubiera otra persona que lo haga, entonces se deben utilizar guantes y lavarse luego con agua y jabón.
Por otro lado se cree también, que los gatos no sienten dolor lo cual es totalmente falso, porque es un ser vertebrado y todo su cuerpo cuenta con receptores de dolor al igual que los humanos. La única diferencia es son muy fuertes y manifiestan su dolor solo cuando no pueden seguir aguantando.
Otra falsedad es que si se le cortan o se le caen los bigotes perderán el equilibrio. Los bigotes del gato tienen una función sensorial, pero no afectan el equilibrio del animal.
Muchos gatos son esterilizados como una medida preventiva, pero no es cierto que debido a esta operación se vuelvan gordos u obesos. Lo mejor que se puede hacer luego de haberlo sometido a este procedimiento es someterlo a una dieta equilibrada y con visitas al veterinario para que recomiende lo más indicado.
Por ninguna razón se debe tomar al gato como un animal de experimentación, se han visto casos en donde estos felinos son usados como juguetes para simular caídas. Es verdad que tienen desarrollada la capacidad para caer de pie, pero a veces no pueden controlarlo y puede padecer ciertas lesiones y problemas serios.
Lo mejor es tratar a nuestro gato como lo que es, una mascota, un amigo, un acompañante o un miembro más de la familia.