La leche no es un buen aliemnto para los agtos debido a que no les es fácil digerirla. Sólo es vital cuando están en etapa de lactancia y deben recibir sólo la que su madre les brinda. Para adquirir cualquier tipo de leche, es mejor consultar previamente con el especialista para que recomiende cual es la mejor y la más tolerable. Siempre se ha pensado que la leche es un alimento esencial para los gatos, sobre todo porque en muchos programas de televisión, se ve que los mininos toman platos y platos de leche, pero en verdad este es un grave error ya que los gatos no tienen en su organismo las enzimas necesarias para descomponerla y digerirla. La leche llega a fermentar el colón y por consiguiente, le traerá problemas digestivos.
La enzima que permite digerir la lactosa se llama lactasa, y con el paso de los años, disminuye en el organismo de las mascotas y por eso mientras más crecen, menos podrán digerir la leche.
Los especialistas recomiendan que solo cuando son bebes, pueden tomar leche y la única que necesitan es la que les da su madre; luego cuando son adultos pueden sobrevivir tomando solo agua, ya que el calcio que necesitan lo obtienen de la dieta equilibrada que se les debe proporcionar.
Lo mejor es comprarles alimento balanceado especial para gatos y según la edad que este tenga, en algunos casos se puede complementar con algún suplemento vitamínico pero siempre que sea recetado por el veterinario.
Y si se quiere dar algún tipo de leche, entonces lo mejor es comprar la que venden en algunos centros especiales para mascotas, adquiriendo las leches que contienen menos lactosa, pero hay que saber que esta nunca debe reemplazar el agua.
Los gatos necesitan beber mucha agua y la leche es un alimento, por lo tanto si le da en varias cantidades, se le estará reduciendo la parte del alimento que en verdad necesita. La leche debe ofrecerse en cantidades pequeñas, como si se tratara de un premio y no todos los días.
Se ha comprobado que diluir la leche en partes iguales con agua, no disminuye la cantidad de lactosa que contiene, de la misma forma ocurre con las leches que vienen semidesnatadas o desnatadas.
El yogurt natural o el queso blanco es mejor tolerado por el estómago del gato, ya que contienen bacterias beneficiosas que van a disminuir la presencia de lactosa.
Lo más recomendable es consultar siempre con el médico veterinario ya que el sabrá que alimentos y que productos son los mejores para nuestros amigos.