Los gatos son animales delicados en cuanto a beber agua. A muchos no les interesa y deben recibir estímulos de parte de sus dueños para que la tomen. Si la mayor parte de su comida es seca, se le debe administrar agua en los alimentos.
Al igual que los seres humanos, los animales necesitan beber abundante agua para poder sentirse saludables. Por eso si tenemos una mascota en casa, esta debe contar siempre con agua en su bebedero para que cada vez que sienta sed, se acerque y bebe.
Los gatos, al consumir comida seca, deben tener en su organismo bastante líquido elemento que les permita tener una digestión más rápida y fluida.
Beber agua va a hacer que nuestro gato compense la perdida de la misma, que sale de su organismo a través de la salivación, del sistema urinario y por las heces.
Si el alimento que se les brinda, posee abundante fibra, la cantidad de agua que la mascota elimine, será un poco más alta. Pero la perdida de agua en mayores proporciones, suele darse a través de la orina, y si la concentración de la orina es muy alta, aumenta el riesgo de precipitación de cristales y hasta pueden formarse cálculos.
El consumo de agua en los gatos debe basarse en el peso corporal del animal y en base al consumo de energías. Se aumenta la necesidad de su consumo, si se presentan algunos cambios como altas temperaturas, vómitos, diarrea, o lactancia.
Los felinos encuentran sus fuentes disponibles de agua en los alimentos, en la misma agua que se produce a través de las proteínas, las grasas y los carbohidratos.
Si nuestra mascota incluye en su dieta alimento húmedo como carnes o pescado fresco los requerimientos de agua para su organismo quedan cubiertos y el gato no sentirá muchas ganas de beber, ya que sus necesidades están totalmente cubiertas.
Pero si la mayor parte de su dieta está compuesta por comida seca, deberá consumir casi el 100% de sus requerimientos de agua.
El gato es considerado un bebedor delicado, ya que son muy sensibles a su sabor y a la limpieza de sus recipientes. Su bebedero debe ser de vidrio, de acero inoxidable o de cerámica, es mejor evitar los de plástico porque tienden a fijar olores.
Si hemos notado que no bebe lo suficiente, se puede agregar un poquito de leche al agua para estimular su consumo.
Nuestro minino debe acostumbrarse a tomar agua, con la misma frecuencia con la que come, es decir de 10 a 15 veces por día.
No se convierte en una buena opción, agregar sal a su alimento para que beba mayores cantidades de agua, porque al ser una medida diaria puede resultar peligrosa y acelerar el pasaje de agua desde las células hacia la sangre, restaurando el balance de los minerales que pueda tener. En conclusión con este método, el gato orinara mas llegando a sufrir una deshidratación celular.