Existen pequeños parásitos que suelen pasar inadvertidos a simple vista, nosotros ni sospechamos de su presencia y nuestros canarios padecen su apetito por la. Uno de estos parásitos es conocido popularmente como ?piojillo?? o piojo rojo y si no lo erradicamos se puede convertir en una verdadera plaga. El que no podamos ver así de fácil al piojo rojo no quiere decir que no esté presente en la jaula de los canarios, estos bichos tienen hábitos nocturnos y el resto del día simplemente se esconden en cualquier espacio.
Con apenas menos de un milímetro de tamaño el piojillo es una gran amenaza para la salud de la mascota, atacando y causando malestar a los canarios ni bien cae la noche. Este parásito elige como primeras víctimas a los canarios más débiles o a las crías que durante la época de cría pasan todo el tiempo en el nido.
Si tus canarios están siendo picados por los piojos rojos notarás que su piel se torna pálida por la disminución de la sangre; además se muestran más inquietos, esto lo notarás más en la noche cuando los parásitos y el efecto de las picaduras les causan rascarse o frotarse animosamente por varias zonas del cuerpo.
El descuidado en la higiene tanto en las aves como sus jaulas son la gran debilidad que los piojos rojos ven como una invitación a convivir con los canarios, si no se controlan a tiempo es probable que estos diminutos seres se vuelvan una terrible plaga.
Si observas de noche verás de seguro a estos parásitos en plena acción, prueba tapando la jaula con algún trapo completamente blanco, de seguro a la mañana encontrarás manchas o uno que otro piojillo. No te quedes sin hacer nada, lo primordial es seguir el tratamiento que el veterinario describa para erradicar a estos piojos de la jaula del canario.