El miedo de los perros a los sonidos fuertes como los fuegos artificiales o los truenos debe ser combatido con naturalidad. Tal vez en aquella situación tienes que estimular al perro para que se divierta y juegue, utiliza algún alimento como las galletas a modo de premio. Siendo tú la persona que sirve como guía para él, debes mostrarte sereno en los instantes de ruidos intensos, no expreses miedo pues te restarán seguridad y tu perro entenderá mal la energía que proyectas. Puedes diseñar también un espacio en tu hogar donde los sonidos fuertes no lleguen.
Como entrenamiento para que tu perro acepte estos sonidos como algo natural intenta que él escuche estos sonidos hasta que se acostumbre. Puedes bajar sonidos de truenos y fuegos artificiales de la Internet, luego inicia el entrenamiento para que los escuche a diario en bajo volumen, poco a poco incrementa el volumen hasta que se sienta cómodo con los ruidos.
Ten paciencia pues este entrenamiento no conseguirá frutos de un día para otro. Al final evitarás que tu perro sufra de estrés y evite así los pánicos que lo pueden enfermar psicológicamente. Recuerda que los perros tienen una capacidad de audición superior a la de los humanos y por ello los ruidos altos representan peligro y sienten que deben escapar.