Los perros de raza Eurasier son una mezcla de muchas razas como el samoyedo, el Chow Chow y el Wolfsspitz. Pueden tener la lengua azul o de color normal, son de tamaño medio, bastante fuertes pero muy tranquilos, reservados y cariñosos con sus amos y con los niños. Los amantes de los perros y que desean compartir su cariño con más de una mascota pueden decidirse por tener un can de raza Eurasier, un perro mediano descendiente del Chow Chow y que puede llegar a pesar unos 20 kilos aproximadamente.
Al igual que sus antecesores, esta raza puede tener la lengua azulada, con manchas y algunos la tienen normal como cualquier otro perro. Es una raza propia de Alemania y que se obtenido del cruce entre varias razas como son el samoyedo, el Chow Chow y el Wolfsspitz.
A pesar de no tener un gran tamaño ni mucho peso, es un perro bastante fuerte. Tiene las orejas triangulares, su pelaje es espeso y su cola esta doblada hacia arriba. Puede ser de varios colores pero no se aceptan las tonalidades blanco puro, color hígado o con manchas blancas.
En cuanto a su carácter, podemos describirlo como una raza muy tranquila, que no deja de estar alerta y vigilante. Se lleva de maravillas con cualquier otra raza de perros y con las demás mascotas y es muy fácil que se adapte a cualquier hogar.
Otra de sus características de personalidad, es que es algo reservado con los extraños, pero con los miembros de su familia se muestra fiel y amable sobre todo con los más pequeños, ya que son muy pacientes y disfrutan jugando con los niños.
Suele ser tranquilo, poco destructivo y son excelentes guardianes, pero los machos en especial, no son muy obedientes y suele ser difícil entrenarlos.
En general, se puede decir que son perros equilibrados, afectuosos y no les gusta ladrar mucho. Cuando son cachorros son traviesos y juguetones, pero el paso de los años los hace muy calmos, llegando muchos a ser catalogados como introvertidos y hasta desconfiados.
Es por eso que necesitan de una meticulosa socialización y necesitan estar siempre en compañía y en contacto humano.
Una particularidad que los identifica es que ante la presencia de algún extraño, en vez de ladrar, prefieren gruñir intensamente, lo que los convierte en excelentes guardianes. No soportan la intromisión de una persona ajena en el hogar por lo que se hace necesario, ayudarle a socializar y recibir entrenamiento desde que son pequeños.
Al ser demasiado inteligentes, puede que resulte algo difícil educarlos con delicadeza, por ello a la vez que se les enseña a obedecer, necesitan sentir el cariño de su amo, ser comprendidos y escuchar palabras suaves y mimos.