El Eclectus es un ave propia de Asia, muy inteligente y perfecta para ser mascota. Debe recibir una dieta equilibrada y jamás debe faltarles agua limpia y fresca. Son aves muy saludables, con bellos plumajes y de regular tamaño. Un loro poco conocido por muchos es el llamado Eclectus, originario de Asia y que al ser dueño de vistosas plumas, se convierte en una mascota exótica. Los loros pueden resultar ser uno excelentes animales de compañía, aunque el único problema que pueden presentar es que hablan con mucha frecuencia, volviéndose a veces muy caprichosos.
Dentro de las características de esta ave, destacan el hecho de alcanzar una estatura media de 35 centímetros, y llegan a vivir hasta más de 60 años. Además, son dimórficos sexualmente, lo que significa que la distinción entre hembra y macho, puede apreciarse a simple vista.
El macho es dueño de unas plumas en varias tonalidades de verde esmeralda, posee los lados de color rojo, y tanto su pico como iris son anaranjados. Las hembras pueden ser entre azul y granate, el pico es negro y el iris un tanto amarillento.
Son loros inteligentes y en extremo amigables, tienen una vocalización aguda y a veces llega a molestarse, sobre todo durante las horas de sueño.
La hembra se caracteriza por ser el género dominante de la pareja, mientras que el macho es independiente y separatista.
Cuando se tienen por parejas, en necesario colocarlos en jaulas de gran tamaño y el nido debe ser elaborado con los materiales adecuados como papeles y pelo de cabra, para que la hembra pueda sentirse segura y tranquila.
Pero al tenerlo como mascota, debemos estar bien informados sobre los cuidados que necesita como la alimentación.
A pesar de que se pueden encontrar una variedad de alimentos para aves en el mercado, lo mejor es consultar previamente con el veterinario para que te informe sobre una dieta rica y equilibrada.
El pienso no debe faltar en su dieta diaria, así como verduras crudas y legumbres. Las frutas también pueden ofrecerse, a excepción del aguacate, ya que posee ciertas toxinas que resultan dañinas para el ave.
Solo se le da una ración diaria de alimentos, ya que el eclectus la almacena, consiguiendo comer hasta seis veces cada jornada. Tampoco debe faltarles agua limpia que debe ser cambiada a diario. Como complemento se le pueden ofrecer vitamina A.
Son aves bastante saludables, pero para que puedan mantenerse sanas deben ser alimentadas correctamente, y demostrarles que son queridas. Ante la presencia de cualquier señal o síntoma de enfermedad, como dejar de comer, o dejar de hablar y cantar, se recomienda llevarla de inmediato con el veterinario.