Una de las aves muy queridas por quienes gustan de tenerlas como mascotas es la llamada agapornis roseicollis. de tamaño pequeño y mejor conocidas como pájaros del amor, son inseparables y forman eternas y fuertes uniones. Son de un color verde intenso y su cabeza por lo general es de color salmón. A muchas personas les gustan las aves y creen que pueden ser las mejores mascotas sobre todo cuando son pequeñas y no ocupan mucho espacio en la casa o en el departamento.
En realidad hay una enorme variedad de aves que pueden adaptarse y fácil y rápidamente dentro de un hogar. Los canarios, loros y los periquitos australianos son las aves más solicitadas cuando se piensa en comprar una.
Los canarios suelen ser los preferidos ya que aparte de sus lindos y coloridos plumajes, tienen un canto intenso que alegra a cualquiera. En cuanto a los periquitos australianos, también se han convertido en toda una sensación debido a su fácil cuidado y a los lindos colores de plumas que poseen.
Pero, aparte de estas especies, llega una no tan conocida llamada agapornis roseicollis. Esta suele ser una de las especies más criadas de aves y que se caracteriza por las numerosas mutaciones que presenta.
En total son más de 500 mutaciones dando como resultado combinaciones de color muy diferentes, se pueden encontrar grises con la cara blanca, amarillos, verde pastel, azul pastel, entre otros.
Las hembras son algo distintas a los machos, tienen un color en tono más pálido, son ligeramente más grandes y sus cabezas también adquieren otros matices.
Conocidos como pájaros del amor, son inseparables y deben este sobrenombre a las fuertes y eternas uniones que se forman entre los machos y las hembras.
Su lugar de origen está en el suroeste del continente africano, un lugar que se presenta muy verde casi todo el año, con un clima muy especial e ideal para estas criaturas.
En cuanto a sus características físicas, el agapornis roseicollis es de color verde intenso y su cabeza es de color salmón. Son de tamaño pequeño alcanzado los 15 centímetros, pero su estatura nada tiene que ver con su fortaleza ya que son muy resistentes durante los meses más fríos, sin necesitar de calefacción o de ser colocado en zonas con altas temperaturas.
Su etapa de reproducción se lleva a cabo entre Febrero y Agosto, y en esta época se vuelven demasiado territoriales, siendo efectivo separarlos y observarlos constantemente.
Para alimentar estas aves, se debe elaborar una mezcla de semillas y pipas, a la cual se le puede incluir alpiste, arena, vegetales, calcio y pasta de cría, para facilitar su proceso digestivo.