Las hembras felinas y caninas pasan por etapas de celo en ciertas temporada del año y puede ser complicado mantenerlas tranquilas y evitar que se escapen. Lo mejor es entretenerlas con su juguete favorito, darle caricias, y jugar con ellas. Se les puede hacer escuchar música clásica para que relajen, o en todo caso la mejor propuesta es esterilizarlas. Quien tiene una mascota aprende a conocer todos sus antojos, sus gustos, y las cosas que no quieren hacer. Pero al tener una perrita o una gata, puede resultar realmente preocupante el tener que aguantar sus temporadas de celo.
Cada seis meses las perras se vuelven enfermas de amor, mientras que las hembras felinas no dudan en sentirse atraídas por algún macho, entre febrero y octubre.
Es común que las gatas maúllen sin dejar de hacerlo y que se restrieguen contra cualquier objeto que vean en su camino. Las hembras caninas, por su lado, se ponen inquietas y alteradas. Por eso para muchos, la mejor forma de evitar todos estos inconvenientes, es esterilizarlas.
Pero mientras nos decidimos, podemos entretener a nuestras mascotas llamándoles la atención con alguna golosina, o muestras de cariño. También ayuda darles sus juguetes favoritos, jugar con ellas o masajear su barriga.
Sin embargo, se puede probar también haciéndoles oír música clásica, en especial de Mozart. La música más estridente como el rock o la electrónica, pueden alterarlas y recordarles los sonidos que emiten otros animales, estimulando mucho más su excitación sexual.
Suele ocurrir que las hembras perrunas pierdan el apetito durante estos días y que dejen de sentirse fuertes debido a que gastan mucha energía. Por eso, en esta temporada, se les puede ofrecer ciertos alimentos complementarios como alimentos para bebé, hígado cocido, entre otros.
Y para evitar que tengan contacto con los machos, lo más apropiado es mantener las ventanas cerradas, ya que el olor que emanan es muy fuerte y un macho puede seguir la pista solo olfateando el aire.
Se le puede dar también, una pastilla de clorofila al animal, muy efectivas para enmascarar el aroma.
Es común que las gatas, orinen por toda la casa con el afán de atraer a sus pretendientes por eso es mejor no dejarle entrar a ciertas habitaciones que queramos evitar tengan estas incomodas señales y fragancias para el apareamiento.
Las perras pierden sangre, por lo que también puede resultar conveniente, colocarles pañales para que no manchen la casa.
Al igual que muchos adolescentes rebeldes, las mascotas que se encuentran en esta situación, harán lo que sea con tal de conseguir salir de la casa, por ello los dueños deben permanecer atentos, cuidando que no logren escaparse.