Si se tiene un conejo en casa es bueno saber ciertos cuidados básicos que lo hagan sentirse cómodo y saludable. Su jaula debe ser de gran tamaño para que pueda moverse con facilidad. Su alimentación debe ser balanceada y el agua que bebe debe ser cambiada con frecuencia. Desde hace algunos años los conejos se han convertido en las mascotas preferidas por grandes y chicos. Y es que estos animales son muy tiernos, tranquilos y pueden permanecer en su jaula sin causar problemas en el exterior.
Si se ha elegido tener un conejito en casa, este debe estar en una jaula de tamaño regular. El tamaño mínimo debe ser seis veces más del tamaño que tendrá el animal cuando sea adulto. Por otro lado todo el piso de la jaula debe estar cubierto con papeles o con pedazos de tela para evitar un posible dolor en las patas.
En cuanto a los accesorios, es mejor que su plato sea de metal y que este bien sujeto a la jaula. Su alimentación debe ser balanceada, mezclando alimentos frescos como verduras, forraje y algunos productos especializados que complementen su dieta diaria.
El agua que beben debe ser colocada en un bebedero amplio y esta debe ser revisada y cambiada con frecuencia. Es recomendable darles una cantidad regular de heno y si el conejo es joven se le puede administrar heno de alfalfa. Estas hierbas son buenas para la digestión y les ayuda a masticar de forma adecuada.
Es recomendable colocar una toalla o un pedazo de cartón grueso en una de las esquinas de la jaula para otorgar privacidad al animal. También se sugiere incorporar un arenero de regular tamaño para que el conejo pueda ingresar y girar dentro.
Este debe estar sujeto con pinzas para que no sea fácil de mover. Para que el animal se acostumbre a entrar en el arenero, se puede colocar un poco de heno dentro o dejar unos minutos su plato ahí, hasta que se acostumbre y lo haga un hábito. El heno debe ser cambiado todos los días y la arena una o dos veces por semana.
Si se tiene un conejo bebe es mejor no darle vegetales verdes, sus sistemas digestivos son lentos y no pueden digerirlos con facilidad, causándoles diarreas. Cuando tienen a partir de cuatro meses se les puede dar a parte de heno, puntas de zanahoria, perejil y dientes de león dos veces al día.
Aunque no parezca, los conejos necesitan de mucho cariño y afecto, se puede dejar fuera de su jaula por una o dos horas diarias, pero hay que tener cuidado en no dejar sueltos los cables de electricidad.
Si se ha pensado en esterilizar a la mascota, este procedimiento debe iniciarse a partir de los 4 meses hasta los 6. En el caso de las hembras, la recuperación post operatoria necesita más días, por eso es mejor dejarlas descansar y no tocarlas demasiado.