Los gatos suelen orinarse en cualquier lugar de la casa, pero cuando ocurre sobre las alfombras estas se manchan, quedan marcadas y con un terrible olor. Lo mejor es entrenar al gato para que aprenda donde hacer sus necesidades. Pero si no, la alfombra debe ser limpiada inmediatamente con ciertos productos especiales. Las mascotas pueden convertirse en un verdadero problema cuando no se les entrena desde que son cachorros a tener un lugar específico para hacer sus necesidades. Suele parecer más sencillo entrenar a un perro, sacándolo a la calle y llevando una bolsa para recoger su deposición, pero con los gatos las cosas cambian porque al ser animales más independientes y estar sueltos en todo momento hace que orinen en cualquier lugar.
Algunos felinos tienden a orinar en distintas partes de la casa y cuando los pisos tiene baldosas, sonde mármol o de piedra los problemas no son tan grandes como cuando casi todas las habitaciones tienen alfombras.
Cuando los gatos orinan sobre las alfombras, estas se manchan, apestan y quedan marcas muy feas que si no se limpian de inmediato, toda la casa se inundará con ese olor.
Y limpiar una alfombra no es tan sencillo como parece, el hecho de pasarle solo un trapo no solucionará nada, por eso es necesario aprender a limpiar orina de gato, sin importar los difícil o cansado que pueda resultar.
Lo mejor es limpiar la alfombra inmediatamente, porque la orina se impregna muy rápido y la macha puede hacerse permanente. Ni bien es detectado el olor de la orina debe buscarse que parte de la alfombra ha sido manchada y comenzar a limpiar.
Primero hay que utilizar guantes de goma para evitar tocar la orina con las manos. Se colocan trapos o servilletas de papel sobre la orina y se presiona hacia abajo.
El vinagre es un excelente solvente natural y un potente antibacteriano, por eso se puede hacer una mezcla con agua utilizando una parte de vinagre y tres partes de agua. Esta solución se vierte en la zona manchada y se deja reposar por 5 minutos. Pasado el tiempo, la solución está totalmente asentada y con un cepillo duro se procede a frotar.
Como el vinagre tiene un olor fuerte y mezclado con el propio de la orina, ahora deberá agregarse bicarbonato de sodio sobre la superficie y dejarse unos momentos para que absorba los olores. Después de media hora se pasa un trapo húmedo y se deja secar.
De todas formas lo más recomendable es enseñarle a la mascota que existe un lugar en donde orinar, este puede ser una caja de arena especial o si no se le puede permitir que deje la casa por unos minutos para que haga todo lo que debe afuera.