¿Te ha pasado que quieres sacar a pasear al gato y no lo logras?, su aparente miedo al mundo exterior y la respuesta negativa a tu acción como dueño responsable pueden deberse al exceso de ruidos, los vecinos, los perros y sus ladridos e incluso otros gatos, sin embargo debes lograr que salga a pasear, el mundo exterior le traerá beneficios.
El gato consigue muchas mejoras en su salud al pasear por la calle, y que decir de tu persona como dueño, ambos gastan energías, bajan los kilos acumulados, ejercitan y disfrutan de la compañía entre otras cosas. Por eso hoy te daremos algunos consejos para lograr que el gato deje de ser poco asertivo a los paseos, incluso vas a lograr que use un arnés por seguridad, no queremos que escape y se pierda.
1.- La educación para los paseos fuera de la casa, tiene que comenzar desde que los gatos son pequeños. Desde bebés consigues que se acostumbren a los collares o el uso de ropa que les protege del clima. Si la educación comienza siendo gatos adultos, es probable que recibas un manotazo o que te muerda. Recuerda que el aprendizaje es mejor cuando son pequeños por su estado dócil.
2.- Según su tamaño y necesidades, debes conseguir el equipo adecuado para sacarlo a caminar a la calle, el gato tiene que hallar comodidad en un arnés y correa ya que estará en contacto con su cuerpo. Busca las medidas adecuadas del arnés para que se ciña perfecto a tu pecho, los modelos más usados son los arnés tipo chaleco. Si el gato ya esta acostumbrado a usar abrigos por el frío, entonces se le hará más fácil aceptar el arnés.
3.- El gato tiene que acostumbrarse de a pocos, aquí debe imperar la paciencia, comienza con ejercicios de diez minutos para que el gato no se agote ni fastidie por el arnés, luego retira el aparato y dale algunos mimos y premios. Con el tiempo no le va a parecer extraño el arnés y sabrá que luego del paseo viene la recompensa. Se aconseja no perder de vista al gato pues el arnés puede quedar atrapado en cualquier lugar.
4.- Cuando ya tengas educado al gato con el uso adecuado del arnés, inicia el entrenamiento con la correa. Deja que camine por la casa con el arnés y la correa, luego toma el control y sujeta la correa pero deja que el vaya donde quiera, que sienta que tu le diriges sin marcar tensión en la correa, es probable que las primeras veces el gato se eche en el suelo, no pierdas la paciencia que hasta te puede servir como trapeador, y en medio del juego hasta comienza a caminar a tu orden.
5.- Al salir a la calle el gato estará expuesto a contagiarse de parásitos, bichos y enfermedades, por eso es recomendable que tu mascota salga siempre que tenga al día todas sus vacunas, que no falte a sus citas dentro del calendario de vacunación según lo desarrolle el médico veterinario. Recuerda la importancia de la esterilización.
6.- En la calle el felino va a pasar por muchas situaciones, para nada lo dejes solo, él aprenderá con tu propia confianza. Ya sean escaleras, ascensores, zonas oscuras, lugares cerrados, siempre debe estar cerca tuyo. A todo esto las primeras salidas se recomienda llevar un bolso por si tu gato tiene ansiedad y necesita esconderse, no lo dejes afrontar situaciones de riesgo pues puede desarrollar fobias y ya no querrá salir. Si tu mantienes la calma en toda situación el gato notara tu energía. La idea es que ambos disfruten de las salidas, tu relax será su relax, ya cansado tu gota no liberará energía arañando el sofá.