Los casos de cáncer de mamas en gatas aumenta cuando estas no han sido esterilizadas. Las gatas tratadas con anticonceptivos y con progestágenos, poseen una alta posibilidad de desarrollar cáncer de mama, siendo la edad de mayor incidencia es entre los 8 y los 10 años. Cuando se ven casos con tumoración mamaria, casi siempre se recomienda realizar una cirugía radical. Se han sabido de muchos casos de gatas que padecen de cáncer de mamas, sobre todo en aquellas que no han sido castradas.
Según muchas investigaciones, las gatas que son tratadas con anticonceptivos con progestágenos, poseen una alta posibilidad de desarrollar cáncer de mama; mientras que aquellas que han sido castradas, las posibilidades de contraer esta enfermedad son casi nulas.
Especialistas confirman que la edad de mayor incidencia es entre los 8 y los 10 años, siendo menos las probabilidades en aquellas hembras que han sido castradas antes del año.
Por otro lado, resulta afirmativo que casi el 85% de los tumores que se desarrollan en las gatas son malignos; el 50% presentan tumores múltiples afectando a varias mamas a la vez.Los tumores se desarrollan en extensión y comprometen rápidamente el ganglio linfático de la zona.
Cuando se ven casos con tumoración mamaria, casi siempre se recomienda realizar una cirugía radical.
A veces suelen confundirse los casos de tumores múltiples con hiperplasias mamarias, que se refieren al aumento del tamaño de los tumores, más no de los mismos. Esta última se desarrolla en gatas jóvenes y afectan a múltiples mamas, relacionándose con el ciclo sexual.
Una vez que la mascota sea diagnosticada con tumores, el pronóstico y el tiempo de vida que le quede, va a depender del tamaño del tumor. Si mide más de 3 centímetros, puede quedarle seis meses de vida; si tiene un tamaño de 2 cm puede que sea un tiempo de dos años; y si es más pequeño, la esperanza de vida aumenta.
Pero, todo va a depender también de que los tumores no estén comprometidos con los ganglios linfáticos, y del tipo de células que forman el tumor.
Uno de los tratamientos más eficaces es quitar las mamas afectadas de uno o de ambos lados del cuerpo y el ganglio linfático para poder hacer un estudio del grado de malignidad que pueda tener.
Una vez que los tumores han sido retirados no se recomienda un tratamiento con quimioterapia. Si los tumores son de una tamaño mayor a 3 cm, si se puede indicar quimioterapia hasta que se disminuya el tamaño y el crecimiento del mismo, para después analizar si se opera o no.