Los camaleones mascotas deben tener una alimentación balanceada que incluya insectos pequeños como grillos, cucarachas o moscas de la fruta. Lo mejor es alimentarlos al medio día y no debe faltarles suplementos de calcio y fósforo que ayudan y mantienen su estructura. Muchas personas tienen camaleones como mascotas, reptiles muy famosos por su habilidad de cambiar de color, por sus ojos que pueden moverse con total independencia y por su lengua rápida y alargada. Pero estos reptiles escamosos pertenecen a un grupo bastante antiguo ya que se conocen como fósiles de camaleón, procedentes de Paleoceno, familia emparentada con la de los agámidos.
En su hábitat natural los camaleones detectan a sus presas por el movimiento y por su agudeza visual, cualquier mínimo movimiento es detectado por sus ojos, que continuamente vigilan el entorno.
Cuando los adoptamos como mascotas se les debe ofrecer una alimentación balanceada y variada que no sature y cansen a los camaleones. Las dietas monótonas a la larga les perjudican, comen principalmente insectos pequeños de cientos de especies o individuos de su propia especie pero de menor tamaño, por supuesto que esto depende del tipo de camaleón que hablemos, ya que en la dieta de estas mascotas pueden existir frutas, vegetales y hasta roedores.
Los insectos le aportan el balance necesario de nutrientes para su alimentación. Los insectos a balancear son gusanos de seda, grillos, moscas de la fruta, cucarachas y langostas. Estos se deben equilibrar para que no resulte tedioso para el camaleón y se pueda balancear las proteínas, azúcares y lípidos.
Para una buena digestión de estos alimentos en la jornada diaria se recomienda alimentarlos al mediodía, horas en el que su cuerpo ha alcanzado un nivel de temperatura adecuado y dispone de suficiente tiempo para realizar la digestión, no se aconseja que coman en horario nocturno.
Un oligoelemento necesario para su alimentación es el calcio y fósforo, ya que ayudan a formar parte de su estructura o mantenerla cuando son pequeños o se encuentran gestando.
Las especies de camaleón como el Furcifer pardalis toleran la inclusión de vegetales y frutas en sus alimentos, siempre y cuando esta no sea diaria, por tanto se deben adicionar en forma ocasional y de vez en cuando.
Cuando se les entregue alimento vivo se les debe brindar insectos ricos en calcio, fosforo, grasas, quitina. El uso excesivo de insectos ricos en estos alimentos los puede hacer caer en obesidad y anorexia, e incluir calcificaciones malignas.
Como acotación adicional, una dieta rica y variada en oligoelementos y vitaminas son fundamentales e indispensables para asegurar una adecuada salud de nuestra mascota.