El ladrido de los perros puede ser controlado practicando muchas actividades con el perro. Se puede dar muchos paseos, jugar a tirar una pelota, y si estos no funcionan entonces se le puede reprender cada vez que ladre mucho, con un roceador de agua en el hocico. 
A pesar de que muchas razas de perros no ladran ni hacen muchos ruidos, la mayoría tiende a ladrar por distintas razones, siendo una de las principales, la manera de poder comunicarse. Pero a veces, estos ladridos se tornan muy molestos e incomodan a los miembros de la casa, tratando de encontrar la forma que dejen de ladrar o hacerlo por menos tiempo.
Ahora si tu mascota ladra constantemente y para que deje de hacerlo le gritas o haces más ruido, solo se conseguirá incentivar más sus gritos y ladridos. Los perros tienen en su cabeza que al ladrar van a conseguir lo que quieren, por eso cada vez que quieren llamar la atención o ncesitian algo, sabran que lo lograrán a través de gritos, ladridos muy insistentes y fuertes.
Pero felizmente que este problema tiene solución, existen unos cuantos trucos muy sencillos que ayudarán a terminar con el escándalo provocado por la mascota.
En primer lugar, se debe sacar a dar paseos con el perro, ya que esta comprobado que aquellos animales que no hacen atividades físicas, tieneden a presentar mayores problemas de comportamiento. Por eso al salir con él, se le proporciona estimulos visuales, auditivos y olfativos, además de que se le está dedicando un tiempo sólo para él, al llegar a casa estaá mucho más tranquilo, relajado y lo mejor, permanecerá en silencio por tiempo prolongado.
Los juegos también son importantes, podemos jugar con una pelotita al viejo juego de tirar y pedirle a la mascota que corra a buscarla para devolverla. En caso no haya pelota, se puede jugar con cualquier objeto como un trozo de madera.
Con esta actividad se relajarán tanto si cuerpo como su mente, evitando la depresión.
Ahora si comienza a ladrar sin motivo alguno se le debe reprender con algo que haga mucho ruido como una lata llena de moendas, o si no se puede tener un frasco pulverizador con agua que se le echará en el hocico. Con cualquiera de estos métodos, saldrá del estado en que se encuentra y que le hace ladrar sin parar.
Cuando la mascota se comporta bien, no ladrando en situaciones que comúnmente lo haría, también se le debe estimular su buen comportamiento, acariciándolo, mimandolo, o dándole una galleta para perros.
