Un perro sociable es mejor visto y aceptado que un perro que se la pasa ladrando o gruñendo a todos. Socializar hace que tu perro ignore algunos estímulos urbanos que pueden hacerlo un perro lleno de miedos y fobias, también podrá formar parte de un núcleo humano además de rodearse sin problemas de otros animales de la zona. Muchos perros necesitan aprender a socializar, este proceso puede ser guiado por el propio dueño así la mascota se adapta al mundo que le rodea muchas veces con expresiones ruidosas como el tráfico de la ciudad o la compañía de demasiadas personas. Si es un perro sociable podrá ignorar estas cosas y continuar con normalidad su día sin desencadenar una respuesta negativa.
La socialización es clave para la educación de tu perro, desde cachorro debe acostumbrarse a lo que le rodea para conseguir reacciones adecuadas distantes de los miedos y las agresiones frente a otros perros, animales, personas y entornos de mucha actividad.
Socializar al perro es no distanciarlos de los estímulos externos, de la calle o las ciudades, de la bulla y las personas, todo y más favorece a que en el futuro no tenga conductas agresivas y de miedo como por ejemplo el morder a las personas o atacar a perros y otros animales.
El proceso de la socialización comienza desde que es un cachorro por eso los expertos señalan que el can no debe ser separado de su madre tan pronto puesto que rodeado de los demás cachorros aprende a no morderlos cuando se trata de jugar. Durante los cuatro primeros meses de vida el cachorro pasa por la etapa crítica de la socialización la cual fortalece su equilibrio y habituación con el entorno que le toca vivir.