El perro de San Huberto o Bloodhound, procede de la región norte de Francia y Bélgica, es una excelente mascota y posee el olfato más desarrollado del planeta. En cuanto a su salud, son algo débiles del estómago y su esperanza de vida oscila entre los 10 y 12 años. La raza de perros conocida como San Huberto, es considerado una de las mejores sobre todo para ser mascota. Su nombre original es Bloodhound y procede de la región norte de Francia y Bélgica.
Su apodo proviene de los monjes del monasterio de San Huberto, ya que se cuenta que fueron ellos, los responsables de crear esta raza.
Es muy perro bastante inteligente y la policía suele usar esta raza en la realización de muchas de sus misiones. Posee una extraordinaria capacidad de rastreo, y es considerado uno de los mejores sabuesos del mundo.
Está también considerado como el can con el olfato más desarrollado del planeta, capaz de seguir un indicio que tenga más de dos semanas.
Los pliegues internos de sus fosas nasales son bastante sensibles, razón por la cual su sentido es extraordinario.
Al tener una alta capacidad para el rastreo, son capaces de distinguir dentro de una gran variedad de olores y seguirlos incluso a través del agua.
Como mascota es también una de las mejores, ya que son dueños de un carácter tranquilo y son en extremo cariñosos.No son agresivos, y algunos pueden ser tímidos con personas extrañas.
Es necesario que esta raza haga ejercicios a diario para evitar posibles problemas físicos, y es vital asearlos con regularidad ya que les encanta jugar escarbando y revolcándose en la tierra. Tienen el pelo corto, pero debido a sus juegos es mejor prevenir cualquier tipo de infecciones, sobre todo aquellas que se presentan en el oído.
Al salivar en exceso, debe tenerse mucho cuidado con el suelo y las paredes, así como con los objetos que se lleva a la boca ya que puede prevenir bacterias.
Son algo débiles del estómago, por lo que se recomienda seguir una dieta concreta y saludable. Es común que padezcan de trastornos gastrointestinales, lo que les da una esperanza de vida de 10 y 12 años.
Deben ser alimentados una hora antes, o una hora después de haber comido y sus platos de agua y alimento deben ser colocados en lugares elevados.
Los perros de San Huberto tienen las orejas tan largas que se convierten en un preciso escondite de pulgas y garrapatas. También se debe tener especial cuidado con los ojos y los pliegues de su piel, zonas bastante sensibles, y que a veces pueden irritarse.