El cáncer es una enfermedad que puede atacar a cualquier ser humano y animal y como en la mayoría de los casos, la quimioterapia se presenta como uno de los mejores tratamientos. En el caso de los perros con esta enfermedad y que reciben quimioterapia, no presentan efectos secundarios y responden de forma positiva al tratamiento. Sabemos que el cáncer es una enfermedad que puede presentarse en cualquier ser humano y los animales también se convierten en sus víctimas. Y todos hemos conocido o tenido algún amigo que, como parte de su tratamiento, ha debido someterse a una o varias sesiones de quimioterapia.
Pero la quimioterapia también es parte del tratamiento de la enfermedad en los animales, y si bien es utilizado como un tratamiento paliativo para tratar tumores, también puede agregarse alguna intervención quirúrgica, sobre todo en casos en donde el tumor este muy localizado.
Sin embargo, si nos dan esta triste noticia relacionada con la mascota y se hace necesario el uso de la quimioterapia, debemos pensar que si es agresivo en las personas, se presentan menores efectos secundarios en los animales y pueden ser mejor controlados por el veterinario.
De debe pensar también que con la quimioterapia no se trata de alargar la vida del animal, sino de mejorarla el mayor tiempo que se pueda.
Pero este tipo de tratamiento se recomienda para dos tipos de cáncer el linfosarcoma o tumor que aparece en las células llamadas linfocitos; y para el mastocitoma o tumor de las células conocidas como mastocitos. Siempre se debe tener en cuenta, el estado en el que se encuentran una vez ubicados, ya que en algunos casos no se aconseja aplicar esta técnica.
Cuando la enfermedad se ha expandido y se encuentran tumores en todo el cuerpo, puede ser que sea necesaria la quimioterapia, ya que resultaría imposible realizar una operación quirúrgica.
Cuando se encuentran tumores localizados, el veterinario primero decidirá operar para después recomendar quimioterapia y que esta sirva para retrasar la aparición de estas células.
Se han presentado casos en donde se encuentran tumores de gran tamaño, pero que no se han extendido por todo el cuerpo, por lo que se prefiere primero, administrar la quimioterapia para reducir las dimensiones y después operar para poder extraerlo.
Al no ser muy agresivo en los animales, solo un mínimo porcentaje sufre efectos secundarios graves y dependiendo de las dosis que se ha usado como alteraciones digestivas y falta de apetito, vómitos, diarreas; caída del pelo o cambio del color del mismo en ciertas zonas, y una baja de las defensas lo que aumenta el riesgo de que el perro pueda contraer otras infecciones.
Lo bueno es que ahora, más del 80% de los casos que han recibido quimioterapia responden de forma positiva al tratamiento.