Los gatos también son unos viajeros curiosos, ellos disfrutan de salir del hogar, acompañar a la familia y descubrir territorios abiertos. Al igual que a nosotros un viaje largo puede resultar al gato incómodo pero siguiendo estos consejos el viaje será placentero. Según los expertos lo primero es conseguir que los gatos se acostumbren al coche, tanto al exterior del vehículo para conseguir ingresar sin miedo como a su interior para que se sienta cómodo sin notar diferencias. De veras hay que tener paciencia con los felinos.
No tengas prisa el gato debe ingresar al coche poco a poco, deja que la mascota conozca el coche durante los primeros días, luego puedes ir introduciendo al gato ayudado de alguno de sus juguetes o comida para gatos. Los primeros viajes deben ser cortos. Recuerda que debe aprender a viajar dentro del transportín.
Realiza paradas cortas para que el gato no se estrese si los viajes son demasiado largos, si te gusta poner música que sea a volumen bajo para que no se asuste. La idea es que el viaje le sea cómodo tanto como resulta con las personas.
El veterinario puede recomendar el uso de algunos sedantes para que el gato viaje tranquilo, también existen las feromonas para aliviar los mareos que tienen algunos gatos. De todas formas indaga con el doctor que ve a tu felino, él puede administrar productos que relajan a la mascota.
No olvides que el gato tiene que viajar en lugares con buena ventilación, donde no se agobie con demasiado frío o calor. Recuerda que el gato debe comer unas tres horas antes de viajar.